viernes, 10 de septiembre de 2010

Capitulo 12

Habia pasado una semana desde que Carlise me confirmara, atraves de los análisis y pruebas necesarias que estaba embarazada, lo mas estraño es que estaba de 10 semanas según Carlise, eso parecía algo imposible ya que había pasado poco mas de una semana desde que tuviera relaciones con Edward.
Edward en un principio estaba un poco reticente, ya que pensaba que podría ser malo para mi tener este tipo de embarazos humano-vampirico. En Carlise y yo lo tranquilizamos porque yo me encontraba bien, claro dentro de las nauseas, mas hambre y cansancio de lo normal.

Hubo una mañana en la que desperté antes de lo normal ya que tenia un hambre voraz, al estirarme en la cama pude darme cuenta que Edward no se encontraba ahí. Fui hasta el baño para poder arreglarme un poco y vestirme, cual fue mi sorpresa que al intentar abrochar mi pantalón no fui capaz de hacerlo.
- Uuff estoy empezando a parecer una pequeña foca. Me dije a mi misma mirándome en el espejo.
Al final terminé poniéndome un pantalón de chándal y una camiseta de Edward para que me quedara holgada, sabia que alice me regañaría pero no había otra cosa. Al salir del baño no se como me las apañe para tropezar con migo misma, para terminar dándole una pequeña patada al marco de la puerta lo que me causo bastante daño porque aun iba descalza. Como pude termine de calzarme y me encamine hacia la cocina. Desde luego este no era mi dia no se que mas podría pasar, mi humor fue decayendo desde que desperté y vi que Edward no estaba a mi lado, pero seguro que algo importante tenia que hacer, nunca me dejaba solo y mas después de lo del embarazo.
Antes de bajar, me pase por la habitación de tony para ver como se encontraba, me sorprendió lo bien que se había integrado en nuestra nueva familia y en el colegio. Le di un beso en la frente y sali de la habitación sin hacer ruido, aun le quedarían un par de horas de sueño.
Cual fue mi sorpresa al llegar al piso de abajo, cuando llegue a la sala que vi como Edward tenia una muy agradable conversación con Tanya, había conocido a la nueva familia hacia unos pocos días, y la verdad todos eran muy amables con la ecepcion de tanya claro que se la pasaba coqueteando con Edward cada vez que podía y eso me sobrepasaba.
Me quede parada en el marco de la puerta unos segundo que para mi fueron minutos para haber si se daban cuenta de mi presencia, se ve que tenia sus super sentido de vampiros apagados, asique me di la vuelta hacia la cocina, cual fue mi sorpresa que mi indiscreto estomago rugió en ese momento.
- Bella? Me llamo Edward, como si pudiera ser otra persona. Seguí mi camino a la cocina sin contestarle. Se planto en frente mío.
- Si no te molesta me gustaría ir a la cocina asique….. le hice un gesto para que se apartara pero no haber contestación de su parte intente esquivarlo, con tan mala suerte que volvi a tropezar, pero esta vez estaba Edward para no hacerme daño.
- No quiero importunar, sigue con tu charla, yo ire a desayunar. Dije molesta, esa mujer me irritaba mas de lo normal.
- Bella…..
- Bella que? Tengo habre sino te importa. Fue entonces cuando se aparto, y me dejo ir a la cocina.
Comencé a prepararme el desayuno, huevos, bacon, tostadas, fruta, algo de cereal y zumo. Comencé por el plato caliente para que no se enfriara fui acabando con todo poco a poco y apilando los platos usados en un ricon, cuando tanya apareció por al puerta de la cocina.
- Valla!!! Si que tenias hambre humana. Me dijo en tono burlon.
No la conteste simplemente, la mire con furia y segui comiendo mi fruta, cuando termine, lo puse con los platos sucios y comencé a comerme los cereales con leche.
- Sabes he tenido una conversación, bastante interesante con Edward, sabes?
- Y yo que me alegro, dije en tono sarcástico. Me sonrio.
- Sabes verdad? Que si no fuera por el mostruo-bastardito Edward no estaría contigo. Dijo en un susurro. Me quede perpleja por como había llamado a mi hijo-a. una rabia iba subiendo por mis entrañas.
- El y yo estábamos muy bien antes de que tu regresaras, la verdad que me parece muy egoísta por tu parte quedarte a su lada cuando no tienes nada que ofrecerle, no cree?
- Y tu que puedes ofrecerle, según tu? Dije con mis ojos húmedos.
- La eternidad, algo que a lo mejor te lo hubiera planteado al principio cuando os conocisteis, pero ahora también esta el problema del primer bastardito no? Deje de comer y me puse en pie.
- Y por cierto yo dejaría de comer tanto, ya que no pareces una pequeña foca, sino una grande y como sigas asi pareceras una bien grande. En ese momento cogi el tazon de cereales y se lo lance, bañándola con la leche.
- Humana imbécil!! siseo
- Fuera. Dije seria. Me ignoro como era de esperar.
- Que te largues!!!!!! le dije.
- No me puedes echar de una casa que no es tuya sabias?
- Es mi casa hasta que me digan lo contrario, y tu no eres nadie para decírmelo asique…. LARGO!!!!.
- Te dijo que te largaras y no se q que estas esperando, dijo una voz seria a mis espalda. Tanya quedo palida y salió por la perta de la cocina que daba ala parte trasera de la casa. Cuando me di la vuelta las lagrimas bañaban mis mejillas y Emmet avanzaba hacia a mi, lo abrace y me desahogué con el.
- Mostruo-bastardo, lloriquee en su pecho.
- Que? Dijo
- Le dijo mostruo-bastardo a mi bebe. Y comencé a llorar otra vez. Alguien maldijo a mis espalda, al girar me fije que toda la familia se encontraba ahí, todo vinieron y nos unimos en un abrazo familiar, pero me faltaba alguien.
- Donde esta Edward pregunto Alice?
- No lo se, conteste separándome y limpiándome las lagrimas. Nos fuimos a sentarnos al sofá, cuando cinco minutos después apareció Edward por la puerta.
- Donde te has metido?, pregunto Emmet
- Que donde me e metido? Emmet para que me mandas un mensaje diciéndome que me reúna contigo que es importante y luego no apareces. Dijo molesto.
- Yo no te e mandado nada y menos desde mi teléfono ya que hace unos días que lo perdi de vista.
- Tanya. Dijo Alice después de un rato de silencio. Solo con escuchar ese nombre, me volvieron las ganas de llorar y no lo pude soportar. Edward se acerco a mi e intento secarme las lagrimas, cosa difícil porque no dejaron de caer. Me cogió en brazos y me llevo a nuestra habitación. Me dejo sobre la cama y me abrazo, yo lo abrace lo mas fuerte posible.
- Que paso amor? Pregunto cuando me calme un poco.
Le conte todo lo que habia hablado con tanya o mas bien lo que ella me había dicho. Se puso tenso cuando le conte lo que dijo de nuestro bebe y de tony.
- No eres ni siquiera una pequeña foca amor, te ves hermosa con esta tripita en la que llevas a nuestro pequeño bebe. Dijo besándome el vientre.
- Y no te preocupes que tanya no te va a molestar mas, de eso me encargo yo. Dijo dándome un beso en los labios.
Los siguientes días pasaron con toda normalidad, cada vez estaba con gordita, hermosa pero gordita como me decía Edward. Alice solo necesitaba que la ropa me fuera un poco prieta para tener una escusa para llevarme de compras, y llevarse con ella medio centro comercial. En ese momento me encontraba feliz.
Tanya no volvió a fastidiar, mas que nada no volvió a pisar la casa, ni ella ni nadie de su familia, ya que la condición que esme le puso fue disculparse Edward y conmigo y no lo hizo, por lo menos no conmigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario