Capitulo 13

Habia pasado mas de un mas mes desde que me entere que estaba embarazada, y estaba enorme, según Carlise el parto estaría programado para dentro de otro mes y algo. Todo iba bien….., bueno si lo pensamos mejor posiblemente no. Por que? En realidad no lo se, por un lado era difícil el hecho que tony me preguntaba por el bebe y como me crecia tan rápido la tripa, yo le decía que era porque su hermanito iba a ser especial, y ahí era cuando empezábamos con las “discursiones” ya que el pensaba que yo ya no lo iba a querer porque el no eran tan especial como su hermanito.
Por otro lado pero no menos importante claro, estaba Edward que no se porque casi no me hacia caso, no entendía, porque era Alice la que siempre me tenia que ayudar a todo, en la ducha, a vestirme…. Yo estaba bastante torpe, necesitaba ayuda para casi todo, la verdad no entendía como con tony pude salir yo sola adelante.
Ahora estaba aquí frente al espejo intentando abrocharme tanto los pantalones como el sujetador, era bastante frustrante el echo de no poder vestirme por mi misma y siempre necesitar ayuda de los demás.
- Ay!!!!!! Mierda. Grite con agonia, esto solo me pasaba ami.
- Que paso? Pregunto Edward preocupado. Al verme medio vestida, se quedo con los ojos como platos. La reacción que siempre tenia cuando me veía casi sin ropa. Que realmente yo no entendía.
- Me puedes ayudar por favor, sola no puedo. Le dije en tono de suplica.
- Esto…. Mmmm ……. Mejor llamara a Alice. Siempre igual, “llamo alice, llamo alice” era lo único que sabia decir.
- Si eso llama Alice que es lo único que haces. Le dije, me miro sorprendido, pero se quedo allí parado.
- Bien si no lo haces tu….. ALICEEE!!!!!. Chille.
- Ahora si no vas hacer nada productivo, te puedes ir, gracias. Por nada. Me di la vuelta y me metí en el baño.
- Bella? Te pasa algo? Pregunto. Que si me pasaba algo, me dice… no conteste cuando.
- Bella? Necesitas ayuda? Pregunto la voz cantarína de Alice.
- Si por favor pasa.
Cuando alice entro, todo fue fácil, me ayudo con el sujetado, me trajo unos pantalones que si eran mi talla, ya que vio que los otros no me abrocharían. Después de vestirme, me arreglo el pelo y me maquillo un poco. Parecía su muñequita. Le pregunte por tony y me dijo que Emmet y Rose se lo había llevado al un lago que había cerca de caminata. Cuando terminamos bajamos a la sala, pero yo por supuesto primero me encamine a la cocina a comer algo. Y allí me encontré con Edward.
- Como te encuentras? Pregunto mientras yo me cortaba un trozo de tarta.
- Bien, gracias. Le conteste secamente.
- Bella? Me vas a decir que es lo que te pasa.
- Mira Edward, si realmente no lo sabes es que eres idiota y yo no tengo la culpa. Segui comiedo y estuvimos un rato en silencio hasta que el lo rompió.
- Pues realmente lo tengo que ser porque no lo se.
- Estoy harta sabes?
- De que? De quien? De mi? Pregunto preocupado.
- Mas bien de tu actitud. Dije mientras recogía el plato y lo metia en el lavavajillas.
- No entiendo. Dijo.
- Que no entiendes? De verdad que me desesperas. Dije gritando y alzando lo barzos.
- No estas conmigo, siempres te escaqueas, no me ayudas, y a mi me gustaría recordarte que también es hijo tuyo sabes!!!!! . no lo podía creer pero era la primera regañina que teníamos.
- Se que es mi hijo, eso ya lo se. Y si no te ayudo es….. es porque….. Se quedo pillado.
- Porque??? Maldita sea, te doy asco? Es eso. Dime porque…. Empece gritando y eso ultimo lo dije susurrando.
- Porque dices eso. En ese momento y no se como acabamos en el salón con toda la familia, excepto Rose y tony, cosa que agradecia.
- Porque cada vez que me tengo que cambiar o me tienen que ayudar en la ducha esta el, “mejor llamo a Alice”. Los ojos me escocían tenia las lagrimas a puntito de salir.
- No digas eso a mi me encantas, estas muy hermosa, bella. En todo caso seria al revés.
- Sabes que no lo entiendo, porque no es que no me hayas visto desnuda. Mas que nada poruqe esto, dije dirigiéndome a mi tripa, no llega ahí por obra del espíritu santo, sabes? No se como Emmet se carcajeó en ese momento. Le mire con los ojos entrecerrado y se cayó de golpe.
- Nos pueden dejar solos, es incomodo, que todos están aquí delante. Todos desaparecieron en ese mismo momento.
- Ni un beso Edward, ni uno solo. Dije sentándome en el sofá, ya no podía mas la espalda me mataba.
- Bella, mi amor. Me dijo agachándose delante mio.
- No me das asco, ni nada por el estilo, todo lo contrario cariño. me resultas demasiado tentadora, nunca te había visto mas hermosa que ahora. Si que he sido un idiota pensando que no te darias caso si ponia un poco de espacio entre nosotros pero era solamente por que no se si sere capaz de contrololarme, mientras que te ayudaba a ducharte o simplemente a vestirte. No sabes lo que asido simplemente esta mañana cuando estabas en sujetador, a requerido toda mi concentración para no lanzarme encima de ti. Dijo con voz tranquilizadora.
- Bien, dije. Pero el punto aquí, es. Porque?
- Porque tengo miedo, bella. Temo a poder hacerte daño a ti o al bebe. Me aterrea el echo de que algo os ocurra por mi culpa. No sabia que decir, todo lo hacia por protegerme, bueno por protegernos. Y yo preocupada por que no me quisiera. No pude mas y me puse a llorar.
- Ssshhhhh!!!!! No te pongas asi, ya paso. Te prometo que apartir de ahora todo estará bien y te ayudare en todo lo que me pidas. Dijo mientras me abrazaba y besaba mi cabeza.
- Lo…lo siento fue lo único que pude decir.
Me subió a la habitación, y nos tumbamos en la cama, me acurruque con el y me quede dormida.
Las siguientes tres semanas pasaron bien, Edward cambio totalmente de su forma de comportarse conmigo. Me ayudaba en todo, pasábamos mucho tiempo juntos y todo era perfecto. Hubo una tarde que estábamos en el sofá que pudo leer los pensamientos del bebe, el dijo que nos quería, y que le gustaba mi voz, se relajaba cuando hablaba o cuando Edward cantaba mi nana para los dos. Ahun no sabíamos que sexo iba a ser asique quedamos en que si era una niña el nombre lo ponía yo, y si era niño el.
Era de madrugada y todos a excepción de Emmet, estaban de caza, a Edward no le gustaba dejarme sola, pero no había remedio, se iba de noche para que no notara su ausencia, y siempre regresaba antes de que yo despertara. Pase por la sala y vi que Emmet estaba jugando con la videoconsola asique me encamine a la cocina a por un pedazo de tarta de chocolate que esa tarde Esme había hecho.
Estaba sentada en la banqueta de la cocina cuadno un pinchazo recorrió desde la espada hacia adelante. No le di importancia porque había tenido un dia horrible con un gran dolor de espalda. Intente relajarme y segui comiendo mi porción de tarta. Estaba por acabar cuando un dolor me dio en la tripa, “ese no era normal” pensé, y otro al cabo de un rato. Empece a hiperventilar, intente controlar la respiración hasta que me dio un dolor mas fuerte que el anterior , parecía como si me estuviera rajando por dentro.
- Aaaaahhhhh!!!! Un grito salió de mi boca. Emmet llego rápido a mi.
- Que te pasa? Me miro preocupado.
- Ya…ya viene llama a Edward.
- Voy. Hablo a velocidad vampirica y no me entere de lo que decía.
- Ya vienen llegaran en pocos minitos. Me cogió en vilo y me tumbo en el sillón.
No se cuanto tiempo paso pero, me parecieron horas, cuando de repente la puerta principal se habrio de golpe y ahí estaba.
- Edward….. fue todo lo que dije, después todo se volvió oscuro