Epilogo

Aquí les dejo el capitulo mas largo que he escrito, espero que les guste dejen sus reviews.

Todo estaba planeado, había entrado en el supermercado del pueblo, compre la primeras cuatro cosas que vi y Salí de allí sabia que esta cerca le olia. Deje el coche lejos aposta justo a lado del callejón en el que Alice tubo la visión. Accidentalmente mis llaves cayeron al suelo, justo cuando iba a levantarme algo me arrollo hacia el callejón. Reí para mis adentros.
Hola bella. Dijo el muy cínico
Eeyy!! Mike que agresividad no Mike. Eres un poco brusco, si querías hablar solo lo tenias que decir hombre. Dije de cachondeo.
No es hablar lo que quiero exactamente.
Ah no. Entonces que?
Pasar un rato agradable, que tu no? Mejor que la ultima vez bella, lo pasaremos bien, ya veras.
En realidad no creo que me apetezca.
Me da igual lo que tu quieras. Me pego contra de la pared y rasgo mi camisa. Escuche a Edward detrás, pero no quería que saliera tan pronto, primero quería jugar con el un poco. Asique le tranquilice. Ssshhhh.
Sabes no se por que haces esto? No tienes a tu mujer porque no me dejas en paz.
Mi mujer no eres tu bella. Yo te quise desde el momento que entraste en el instituto, pero tu te tuviste que fijar en el idiota de Cullen, me dio mucha rabia, no soportaba verte cuando estabas con el. Después el se fue pero ni con esas, nunca me hiciste caso, podíamos haber sido felices, pero nunca me diste una oportunidad.
En un viaje que tuve que hacer en Vancouver, te vi y te seguí, no eras la misma bella, empeoraste, estabas triste sola pero ni con esas me hubieras echo caso verdad
No
Me lo imaginaba, sique una noche te seguí a la salida del trabajo, no lo puede evitar, fue superior a mis fuerzas, te drogue y te forcé. Por lo visto hice un buen trabajo, porque cuando me vistes en la boda de tu padre no te acordabas de nada, incluso me saludaste como si fuéramos viejos amigos.
Pero me volviste a fastidiar Bella tuviste que venir como una familia feliz, con dos niños y el estúpido de Cullen. Siempre estuviste con el verdad?
Si, con quien si no? Pero sabes una cosa? Le dije acercándome a su oído mientras que también bajaba mi mano a su entre pierna. Me acuerdo de todo. Cerré mi mano y estruje con todas mis fuerzas, yo solo quería acabas con una parte de su anotomía y eso estaba completo.
Edward? Es tuyo.
Ahora vas a saber lo que es sufrir. Le dijo Edward.
Solo Edward y yo aviamos venido. Toda la familia había querido venir pero no lo vimos conveniente. De todas formas entre Edward y yo nos apañábamos muy bien.
Le amordazamos y Edward fue rompiéndole hueso a hueso comenzando por los dedos de las manos hasta acabar con cada una de sus miserables piernas, Mike no paraba de retorcerse. Le clavaba las uñas en la piel. No se cuanto tiempo estuvo con el hasta que al fin perdió el conocimiento y quedo tumbado en el suelo. Edward le tomo el pulso, le quedaba poco tiempo.
Pasamos a la segunda parte del plan que era llevar a Mike a la parte mas lejano del bosque y quemar su cuerpo. Pero de esta parte se encargarían Emmet y jaspes ellos lo pidieron y no le íbamos a negar esa arte de la misión.
Llevamos el cuerpo a la parte de atrás de la casa Cullen donde ya nos esperaban. Cogieron lo que quedaba de Mike y se marcharon.
Llegaron cuatro horas mas tarde después de haber incinerado el cuerpo y que no quedara ningún rastro de nada. Pedimos a la vidente de la familia que echara un vistazo para saber si algo había cambiado. Pero parecía que no asique el capitulo de Mike Newton quedaba totalmente zanjado.

Dos días después del gran suceso de forks, nos marchamos. Edward había estado escuchando a la gente y nadie sospechaba de nosotros. Pero un pensamiento que me conto que si que me había llamado la atención.
Jessica estaba mas que contenta de la desaparición de su esposo, al parecer tenia planeado quedarse un par de meses mas en Forks y después mudarse para poder empezar una nueva vida.


Habían pasado dos meses desde que habíamos regresado de Forks. Jugaba con mi anillo en la mano izquierda mientras pensaba en lo feliz que era. Tan solo una semana antes Edward me había pedido matrimonio. Me había tapado los ojos, tan solo había un toque suave a fresas. Me destapo los ojos y fue cuando pude ver que me había llevado a un prado parecido al que había en Forks que habíamos descubierto hace poco, estaba lleno prácticamente el prado de velas aromáticas, de ahí ese olor delicioso. Me había dejado en el centro del prado, tomo una cajita de terciopelo negro del suelo cuando se arrodillo dijo.
Isabella Swan quieres casarte conmigo?
Con esa simple pregunta, un estremecimiento corrió por todo mi cuerpo, me puse de de rodillas a su altura y dije.
Si quiero.
Me paso el añillo por el dedo de mi mano izquierda, cuando este estuvo en su lugar me tire en sus brazos. Nos abrazamos y nos besamos. Estuvimos amándonos toda la noche, hasta que el sol hizo acto de presencia y cada uno teníamos nuestras responsabilidades.

Tan solo hacia que Edward me había pedido matrimonio y Alice me tenia loca, ella se encargaba de casi todo, la lista de invitados iba a ser muy reducida, pero con todo y eso ella quería una boda del año sin ningún tipo de problema en el ultimo minuto, por eso que ya se había puesto manos a la obra.
Mi participación era mínima pero el que me tenga que comprar un vestido no me lo quitaba nadie, pero ahí estaba Alice para echar una mano, o las que hiciera falta.

Faltaba tan solo un día para convertirme oficialmente en la señora Cullen, Alice estaba como loca, era bastante estresante tener un borrón negro corriendo de un lado para otro.
No tuvimos despedidas de soltero, no era necesario, a ninguno nos daba pena perder nuestra soltería, yo en realidad todavía me pienso que estoy en un sueño, que me voy a despertar y voy a seguir viviendo en mi antiguo apartamento y durmiendo en mi antigua cama sola. Alice puso el grito en el cielo, nos costo y mucho además el convencerla que no haríamos despedida, pero por fin nos ignoro, literalmente porque estuvo sin dirigirnos la palabra como unas tres horas, eso era un gran logro para ella. Escuche unos pasos detrás de mí.
- Que piensas señora Cullen?
- En lo feliz que soy , y en que tengo miedo.
- Miedo de que? Bella si no estas segura y quieres dejarlo para mas adelante, por mi no hay ningún problema y los sabes. Dijo mientras que se sentaba a mi lado. Era pasada la madrugada y me encontraba en el porche trasero de la casa, sentada en un banco que Rosalie le compro a Esme no hacia mas de dos semanas.
- No es eso, estoy segura de lo nuestro. Dije mientras me acurrucaba en su pecho.
- Solo es… que pienso que en cualquier momento me voy a despertar y vamos a ser Tony y yo otra vez.
- Bella no estas soñando, porque si no yo también lo estaría, y hace ya muchos años que no puedo hacerlo. Esto es real, lo nuestro es real, nuestra familia es real, nadie se va a entrometer entre nosotros. Seremos felices para siempre.
Nos quedamos acurrucados, hasta que sobre las siete de la mañana me arrollo hasta su habitación y comenzó a arreglarme. La boda seria al medio día. Le pedí una boda sencilla, pero en realidad no se que me voy a encontrar cuando llegue la hora.

- Las doce y cinco, creo que ya es la hora. Ya hemos hecho esperar mucho al novio. Al final hará una zanja en el suelo. Dijo Alice.
Nos encaminamos hacia el salón, las puestas estaban cerradas, todo era sorpresa para mi, según me dijo Alice y era lo peor porque me ponía mas nerviosa aún, estoy segura que si aún fuera humana me hubiera dado un paro cardiaco.
Carlise se acerco a mi, seria el quien me acompañara hasta el altar, a mi papa le fue imposible venir, Sue había tenido un accidente y se encontraba en el hospital. Me parecería razonable que quisiera quedarse con su esposa, no me moleste y Alice se encargo de decirle que le mandaría muchas fotos y le llamaría para darle todos los detalles de la boda.
Las puestas se abrieron, me quede impresionada, todo era…. Blanco parecía que estábamos en el mismo cielo, sobre una nube. Las eran fantásticas y su olor era muy agradable. Después de echar un rápido vistazo por la estancia busque a mi Ángel, nuestros ojos conectaron mientras que andaba por el pasillo.
Escuche unos ruiditos que conocía perfectamente, o pude evitar girar para ver a mi pequeña sobre su abuela, al lado de su hermano, cuando este me vio me regalo una de sus mejores sonrisas que fue correspondida con mucho amor.
La ceremonia fue perfecta, cuando llegó la hora de los votos tartamudeé un poco de los nervios lo que hizo que escuchara la estridente risa de Emmet. Hicimos el intercambio de alianzas y en el momento que el padre nos declaro marido y mujer, fui la persona mas feliz del mundo. Edward poso unos dedos en mi mentón para alzar mi cara y poder darme nuestro primer beso como marido y mujer.
Al girarnos todos nos aplaudieron fue cuando note una mirada sobre mi, enfoque mi vista hasta darme cuenta que era la de Tanya, ya sabia que habían invitado todos, pero no esperaba verla precisamente a ella. Por un momento me concentre un poco para saber que era lo que pensaba, me hizo sonreír porque en su mente solo había: “maldita, maldita, ella no”.
La recepción fue pequeña todos eran amigos de los Cullen, aunque ninguno comía Alice insistió en que cortáramos el pastel e hiciéramos el paripé para las fotos.
Bailamos nuestro primer vals, que al final fue interrumpido por Tony, gustosa baile con mi pequeño. Al acabar la noche prácticamente había bailado con todos los presente, me lo pasé muy bien. Puse un poco de hincapié en encontrar los pensamientos de mi querido esposo cuando escuche. “que pesada, espero que la canción acabe pronto, Bella la va a montar como nos vea, no me quiero imaginar lo que puede llegar hacer” fue entonces cuando lo busque y lo encontré bailando, pero bailando con Tanya no me lo podía creer. Puse atención a sus pensamientos, pude ver como se imaginaba a si misma bailando con Edward, vertida de novia, sus pensamientos fueron mas allá cuando comenzó a pensar en su noche de bodas, ahí si que no, me acerque a ellos y vi que su mano peligraba sobre el trasero de mi marido.
- Que tu mano no baje mas porque si es así tendré que cortártela. Edward me miro con cara de asombro al parecer no me había escuchado llegar.
- Venga Bella no te pongas así, solo quería darle al novio la enhorabuena y tener un simple baile con él.
- Si, me parece perfecto, pero creo que ya bailaste mucho con él. Tome a Edward de la mano y lo a parte de ella.
- Además te doy un consejo, deja de fantasear con MI MARIDO, y búscate tu uno propio, porque si te vuelvo a pillar, pensando que no debes frete mío, no me hago responsables de mis actos.
A partir de ese momento no me separe de Edward ni un momento bailamos toda la tarde y parte de la noche, cuando la mayoría de los invitados ya se habían ido, no encaminamos a un hotel para poder pasar nuestra noche de boda. Seria la única que pasaríamos lejos de los niños. Después de esto nos iríamos de viaje con ellos.

Fue una noche mágica, no dejamos de amarnos en ningún momento, lo bueno de ser vampiros es que no nos agotábamos y era estupendo porque jamás me cansaria de estar con Edward. Estaríamos juntos para toda la eternidad.

CONTINUARA…….

Consecuencias a parte